De cómo una legisladora no puede vivir con un sueldo de $74,000, pero yo vivo muerto de la risa con $22,000
14.02.2013 00:20
De cómo una legisladora no puede vivir con un sueldo de $74,000, pero yo vivo muerto de la risa con $22,000
Hay que joderse con los legisladores de este país. A María Milagros Charbonier los $74,000 anuales que gana no le dan para vivir . ! Dios Santo, no quiero seguir pecando, pero me tengo que cagar de nuevo en la hostia! ¿Cómo es posible que esta loca de atar diga semejante barbaridad, qué carajos se fumó esta señora antes de expresarse de esa manera? ( no hay nada malo en fumarse algo siempre y cuando sea de la que Bill Clinton, Barack Obama y Rolando Crespo fumaban)
Un paramédico se debe conformar como con algunos $21,000, una enfermera graduada más o menos lo mismo, un policía estatal debe estar como en $24,000, un maestro algunos $25,000 y así por el estilo. Sin contar que en esos $74,000 no están incluídas las dietas que aún no se las han suspendido y unos chavitos adicionales que les dán por transportación. Además de lo antes descrito, ser legislador le abre puertas que jamás se abrirán a los mortales asalariados de este país. Que si compro un terrenito, rapidito me le ponen el agua y la luz, que si voy a la junta de planificación rápidito me aprueban los planitos para el chalet, que si abro un negocito más rápido que ligero aparecen todos los permisos, etc, etc, etc.
Mire Mrs. Charbonier, haga ajustes como todas las madres y padres de familia en este país. Suspenda el beauty parlor, el arreglo de uñas, quite el cable tv, la conexión a internet, deje de comprar smart phones, compre ropa interior en Me Salvé, visite a Payless. Cuando haga el tune up del carro, o decida pintar la casa, busque par de tecatos y borrachones que por par de pesos siempre le resuelven a uno. Cuando quiera irse de rumba suspenda el champán y emborráchese con Medalla ( perdón ella es cristiana, me retracto; entonces deje de estar echando ofrendas de $100 en el gasofilacio buscando votos en la iglesia) Váyase de cuando en vez a comer en una fonda en los kioscos de Luquillo o la Playa de Naguabo y deje los putos restaurantes de $200 el plato.
No trate de defecar más arriba del ano (mm debí decir ‘’cagar más arriba del culo’’), entienda que para lo que uds. hacen en la legislatura su salario es más que suficiente. Si con estos ajustes en su estilo de vida, aún ese exiguo salario no le da, pues renuncie. En un universo de 3.7 millones de habitantes de seguro debe haber un montón de penepés con más deseos de trabajar y contribuir a la patria que usted. Estoy muy seguro que con esos $74,000 cualquiera ‘’se pone alante’’ en este país.
¡ A llorar pa’ maternidad, aquí bailamos todos o rompemos la puta radiola!