Divagaciones...

26.11.2012 22:51
Divagaciones metafísicas
 
El paradigma religioso actual nos enseña que somos pobres e insignificantes criaturas carnales que sólo pueden alcanzar el arcano espiritual por virtud de una serie de normas, leyes, mandamientos, rituales y sacrificios.  Nuestra realidad es que somos seres de luz, entes espirituales y que el cuerpo que habitamos es solamente una herramienta para sobrevivir a la densidad del mundo físico de tercera dimensión. Antes de llegar a este planeta quizás millones de años atrás  habitábamos en dimensiones de espacio y tiempo cuántico, en dimensiones no materiales, después que el Hacedor de todo, el Uno, decidió autoexplorarse y del cual formamos parte.  Sin importar cuan evolucionados puedan ser las entidades que se manifiesten en la tercera dimension o fisicalidad, todas necesitan valerse de un cuerpo físico.  El cuerpo es algo así como la escafandra del buzo, que lo protége del hostil ambiente de las presiones existentes en la profundidad del océano. No todas las almas que habitan cuerpos en este plano son simientes de luz humanas.  Aquí hay almas o conciencias de todos los confines del universo, incluyendo almas pertenecientes a la cuarta dimensión o plano astral. Lo que la religión llama los ‘’paraísos, infiernos y purgatorios’’ son subdivisiones del llamado’’bajo astral’’ que en realidad no es un lugar y sí un estado mental.  Las verdaderas dimensiones espirituales están asentadas desde la séptima u octava dimension en adelante.
 
Cuando la muerte nos llama dependiendo de nuestro grado de evolución en la conciencia es muy probable que seamos seducidos a los planos bajos del astral creyendo  haber alcanzado, el ‘’cielo, el nirvana, los Campos Eliseos,  el Seno de Abraham, o el Paraíso’’ Cuando hay experiencias ‘’cercanas a la muerte’’ los que han tenido la experiencia vienen con relatos de haber visto estos lugares, dependiendo de su sistema de creencias. Un cristiano expondrá haber visto quizás a Jesús, un oriental tal vez a Buhda, un muslmán a Mahoma y un Hindú a Vishnu o  Shiva.  Puede haber quien haya visitado un infierno o purgatorio como si fuese pincelado por Dante.  Lo aterrador de toda esta dinámica estriba en que las entidades metahumanas que controlan el ‘’plano astral’’ son las mismas que controlan a los ricos banqueros de la elite mundial a políticos y  la alta jerarquía del clero.  Desde la época de la cuna de la civilización, Sumeria, estas entidades han estado con nosotros, en aquella época eran los ‘’dioses’’ con minúscula, Anu, Enki, Enlil  luego se convirtieron en  la época cristiana y del medioevo  en ‘’demonios y ángeles’’  y para el islamismo eran los ‘’genios’’ ahora se les conoce como ‘’alienígenas grises’’  La etimología de la palabra ‘’demonio’’ viene del griego ‘’ daimón  (el que sabe)
 
Para vivir en nuestra tercera dimensión estas entidades se posesionan de los cuerpos porque de otra manera no podrían manifestarse aquí.  Esto se hace de diversas maneras; ya sea por medio de intricado sistema de ritos como los que se practican en la masonería (la gran mayoría son ritos mágico sexuales) o con la anuencia y aval de un ser humano que permite que la posesión se haga realidad. El uso y abuso de drogas y alcohol, facilita el que una entidad del bajo astral u otra dimensión logre acceso a nuestro cuerpo.  El factor genético es importante, los descendientes de las castas sacerdotales desde la época de Sumeria , así como los de la clase gobernante, tienen una genética distinta al humano de a pie. Desde esa época todos los reyes, monarcas, prelados del romanismo católico y figuras de poder han sido portales interdimensionales para que estas criaturas adelantes sus agendas en el planeta y accedan a nuestra realidad física.  Constantino, el monarca bajo cuyo mandato se aglutinó el cristianismo es uno de ellos. Todas estas escuelas herméticas y ocultas como los Rosacruces, La Masonería, e incluso sectas cristianas que son al parecer inofensivas e ingénuas como los Mormones y los Testigos de Jehová ( en este caso no hablo de la pobre señora que va casa por casa en un encargo proselitista),  la Orden Jesuita en el Vaticano, son los encargados de diseminar todo ese conocimiento y educar a los miembros de esa clase élite. Sin importar que tengamos maestrías, doctorados o bachilleratos nuestra educación es pésima y deficiente.  No compara jamás con la que reciben los globalistas, poseedores de la riqueza obscena y que tienen el control de todos los aspectos económicos y son quienes dictan quien come y quién se muere de hambre. Ellos saben quienes son y cuáles son sus orígenes, nosotros no.  Las religiones, todas y cada una de ellas fueron creadas por estas entidades metahumanas y cada vez que nos descarnamos de acuerdo al punto geográfico en el que vivías te venderán una parcela de ilusión de la cuarta dimension lo cual es un engaño. Luego reeencarnarás nuevamente y te venderán lo mismo en la tercera dimensión y quedarás atrapado en una rueda de reencarnaciones entre la tercera y cuarta dimensión  por miles de años sin realizar grandes progresos.